Desde el pasado viernes 9 de marzo, en la parroquia La Capuchina, en el sector de San Victorino en el centro de la ciudad, la Iglesia arquidiocesana brinda un promedio de 120 almuerzos para los hermanos venezolanos
El comedor opera en la Calle 14 No. 13-68, en la parroquia La Capuchina, de lunes a viernes, entre 11:00 a.m a 1:00 p.m., se brinda un promedio de 120 almuerzos para las personas que se identifiquen provenientes de Venezuela.
Para acceder al almuerzo deben entrar con cédula de ciudadania, el pasaporte o el permiso de la oficina de migración Colombia. Se les brinda el almuerzo para ellos y sus familias en orden de llegada. Deben registrarse en unas planillas, colocando datos personales, antes de pasar a recibir los alimentos.
Por parte de la arquidiócesis de Bogotá se encuentran trabajando en la parte operativa del comedor; el sacerdote Luis Alfonso Canedo Restrepo y dos diáconos permanentes arquidiocesanos; Rafael Rodríguez y Pedro Baracaldo.
Voluntarios al servicio de los más necesitados
Así mismo, de manera voluntaria comunidades o grupos de laicos comprometidos con el servicio, ayudan donando su tiempo y trabajo en este comedor arquidiocesano. Sirven los almuerzos, limpian las mesas, recogen los platos y estan pendientes de las necesidades de estos hermanos. Es rotativo este voluntariado y en promedio son entre 7 y ocho personas que colaboran en los turnos de estos almuerzos.
Además, se tiene contemplado prestar servicios de baño y duchas; salones de reuniones y descanso en este mismo lugar.
Pero lo más importante que se les brinda, a través de estas obras sociales de la Iglesia arquidiocesana, es un apoyo psicosocial y espiritual para que estos hermanos puedan encontrar esperanza en medio de esta dura realidad por la que atraviesan.
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